Los restos mortales del salmantino se velarán previamente en Barcelona, donde desarrolló buena parte de su trayectoria empresarial
La 'Olla Podrida', la madre de todos los cocidos, a la mesa de la mano del Mesón de Gonzalo y el chef José Andrés
Colegio Arzobispo Fonseca se ha convertido hoy en improvisado comedor medieval con el objeto de degustar la conocida comida del siglo XVIII
La capilla del Colegio Arzobispo Fonseca se ha convertido hoy en improvisado comedor medieval con el objeto de degustar la conocida como 'Olla Podrida'. Se trata de una receta que ya se hacía en la ciudad y en otros rincones del país -sobre todo en Castilla-, para dar de comer a los estudiantes en el siglo XVIII.
Comida tradicional de la mano de los cocineros de El Mesón de Gonzalo y el chef José Andrés que han degustado una cuarentena de persona relacionadas con la gastronomía.
La olla podrida mezclaba toda suerte de carnes, verduras y legumbres, se hacía a fuego lento durante largo tiempo en una cazuela grande de barro. En el caso de la preparada en Salamanca protagonismo para los garbanzos de Pedrosillo, capón, tocino ibérico y pichón y las pertinentes verduras.
La olla fue tan famosa en el Siglo de Oro que aparece mencionado en obras de Cervantes, Lope de Vega o Quevedo. Su pedigrí literario alcanza hasta el XIX con Clarín o Balzac, e incluso recibió el reconocimiento de los gastrónomos franceses de esa época, no demasiado proclives a admirar lo que ocurría a este lado de los Pirineos.
El presidente de la Jutna considera una "pérdida inmensa" su fallecimiento a la vez que envía su sentido pésame a sus dos hijos y resto de la familia
La formación, gratuita y práctica, mostrará cómo aplicar herramientas de IA en el día a día y en el trabajo
La concesión, con un plazo de hasta 25 años, busca convertir a Salamanca en un referente logístico nacional e internacional








