El reto al que se enfrenta Oncología en Cáncer de Mama en el Hospital: "El 25% de los casos no son curables"

La supervivencia a 5 años en cáncer de mama ya supera el 85%, sin embargo, para el resto no hay todavía tratamientos suficientemente eficaces

imagen
El reto al que se enfrenta Oncología en Cáncer de Mama  en el Hospital: "El 25% de los casos no son curables"
César Rodríguez, oncólogo del Hospital de Salamanca y presidente de la SEOM (Fotos: T. Navarro)
El autor esTamara Navarro
Tamara Navarro
Lectura estimada: 7 min.
Última actualización: 

La cartera de servicios de la Sanidad Pública de Castilla y León ofrecerá a lo largo de 2024 mamografías para mujeres de entre 69 y 74 años. Este método de detección del cáncer de mama ya se brinda en la región a las mujeres a partir de 45 años, pero ahora se extenderá hasta esa franja de edad superior. 

En Salamanca se detectan cada año en torno a 225 casos de cáncer de mama. Lo cuenta César Rodríguez, oncólogo en el Complejo Asistencial y presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), quien recuerda que también "hay que tener en cuenta los diagnósticos de la medicina privada, serían unos 300".

Según relata, "el cáncer de mama está ligado a la edad, pero su pico no está tan marcado como en otros tipos de cánceres. Está muy distribuido de los 50 de años en adelante".

Sin duda alguna, la palabra cáncer asusta mucho. César lleva treinta años dedicado a la oncología y a lo largo del tiempo, "he percibido que el cáncer se visibiliza con más normalidad. Hay menos miedo a hablar, no hay temor a confesar que se tiene un tumor".

"Ha empezado a formar parte de un lenguaje normal sin que la palabra sea despectiva ni que genere temor. Queda camino por recorrer pero sí he vivido esa transformación. Los avances del diagnóstico y tratamiento han sido la gran revolución".

 

-¿Qué características tiene que tener un cribado poblacional? 

-"Un programa de cribado poblacional tiene que tener unas características fundamentales: la enfermedad que se pretende detectar debe tener una elevada incidencia. En el caso de mama es así porque es el más frecuente en la mujer con una elevada mortalidad. Es el tumor más común en todo el mundo. 

El segundo criterio se refiere a la prueba a realizar, que debe ser accesible y sencilla, como es la mamografía. No es muy costosa y al paciente no le genera demasiadas inconvenientes. El tercer criterio es que en la población que va a ser sometida a la realización de ese cribado se traduzca en un resultado en salud. Una mejora de la supervivencia, al menos de la que participa". 

 

-Históricamente la edad de cribado estaba entre los 50 y los 69 años...

-"Era el rango de edad donde más incidencia de cáncer había. Si nos salimos de esas edades dónde hay menos casos, empezamos a tener que hacer muchas pruebas para detectar pocos casos. La incidencia es mucho más baja.

En las mujeres muy jóvenes tendrían que hacerse muchas mamografías. Apenas habría diagnósticos y no impactaríamos en el objetivo final, que es reducir la mortalidad. De hecho, el cribado no es inocuo. No es adecuado irradiar la mama cuando no es necesario. Además, las mamografías, cuánto más joven eres más difíciles son de interpretar porque hay mucha densidad mamaria. 

En el caso de la edad muy  elevada, es necesario considerar la esperanza de vida de la población y tener en cuenta que detectar un tumor muy precoz a una edad muy tardía a lo que lleva es a un sobrediagnóstico y sobretratamiento. “En ocasiones el tumor no hubiera llegado nunca a ser evidente o dar síntomas". 

 

 

-¿Qué ha ocurrido con el paso del tiempo?

"El cáncer de mama, muy lentamente, se ha empezado a detectar a edades más precoces debido a múltiples causas como son los factores de riesgo (obesidad, consumo de alcohol, dietas inadecuadas, sedentarismo, menor número de hijos, menor tiempo lactancia materna...). 

Por ello, empieza a haber mayor número de casos a edades más tempranas. En algunas comunidades autónomas se amplió la edad de cribado por abajo, a los 45 años. Esto hasta ahora era opcional. Desde el año pasado y en función a una directiva europea, ha hecho que todas las comunidades tengan que realizar el cribado desde los 45 años.

En Castilla y León, por suerte, ya era así desde hace mucho tiempo. Ya había suficientes casos entre los 45 y los 50 años para permitir que el cribado sea rentable en términos de salud. 

A día de hoy, la esperanza de vida en la mujer ha aumentado muchísimo. Se sitúa por encima de los 85 años. Por tanto, las mujeres entre 70 y 75 años que son diagnosticadas sí se pueden beneficiar en términos de curación y ventajas terapéuticas en la misma medida que las jóvenes. Entendiendo que una mujer con esta edad, todavía tiene muchos años de vida por delante, un diagnóstico precoz si puede influir de manera significativa en su supervivencia".

 

-¿Qué se debe hacer con las mujeres por debajo de los 45 años? 

-"Se propone hacer un cribado selectivo, que es diferente al poblacional. Se hace a aquellas mujeres que nos hacen pensar que tienen más riesgo que la media. En las que se ha demostrado que existe una herencia, patologías mamarias previas de riesgo, mujeres con una alta densidad mamaria y fibroadenomas complejos, biopsias previas, etc. 

En estos momentos los tratamientos que se utilizan para el cáncer de mama son más selectivos, para que cada paciente reciba sólo lo que tiene que recibir, lo que llamamos la medicina personalizada. Muchas de las pacientes de edad avanzada pueden ser tratadas con estrategias menos tóxicas que las que se utilizaban anteriormente, con mayor probabilidad de curación. Estamos tratando a más pacientes que antes por edad no se hacía. 

Biológicamente los tumores que aparecen a edades avanzadas son más hormonodependientes y en general con menos agresividad, esto no quiere decir que los pueda haber. Los tumores que aparecen a edades más tempranas suelen ser tumores más proliferativos, con mayor agresividad biológica". 

 

 

"El cáncer de mama no es una enfermedad única, son muchas entidades con características biológicas y comportamientos totalmente diferentes"

-¿Cómo han cambiado los tratamientos a lo largo de los años para tratar a mujeres y hombres? 

-"El 1% de los cánceres de mama se da en hombres, aquí tenemos unos cuantos en tratamiento ahora. El hecho fundamental que ha cambiado el tratamiento del cáncer de mama es el mejor conocimiento de la biología de la enfermedad. Hemos aprendido que el cáncer de mama no es una enfermedad única, son muchas entidades con características biológicas y comportamientos totalmente diferentes, por tanto, el abordaje debe ser diferente. 

Conocer la biología del cáncer de mama nos ha llevado a conocer los mecanismos que hacen que el tumor prolifere, crezca y metastatice. El desarrollo de los tratamientos está siendo mucho más selectivo. Hoy en día en una consulta de oncología médica utilizamos estrategias de tratamiento en mujeres diferentes que no tienen que ver unas con otras. Utilizamos terapia hormonal, anticuerpos monoclonales, quimioterapia de la de siempre, inmunoterapia o fármacos modernos que llamamos conjugados". 

 

-¿Esto ha hecho que la supervivencia aumente? 

-"Todo ello permite tener un incremento de la supervivencia mayor. En estos momentos una mujer diagnosticada de cáncer de mama, con independencia del estadio o tipo de tumor, sabemos que tiene unas probabilidades de estar viva en cinco años que superan el 86%. Este incremento va poquito a poco. Hay otros tipos de tumores que incluso con enfermedad avanzada pueden tener supervivencias muy prolongadas, de muchos años". 

 

-¿Cuál es el reto? 

-"Aquellos cánceres de mama que recaen, que hacen metástasis y que no son curables. En torno al 25%. Podemos conseguir largas supervivencias y tratamientos que permitan tener muy buena calidad de vida durante mucho tiempo, pero no son curables. El cáncer de mama sigue siendo la principal causa de muerte de las mujeres en España, 6.600 casos anuales. El reto está no en cronificar de una manera corta, sino en que las supervivencias sean más largas y si es posible incluso curar el cáncer de mama metastásico que en estos momentos no somos capaces de hacerlo".  

 

-¿Cómo ha mejorado el Hospital de Día Onco-Hematológico con el traslado al nuevo edificio? 

"Las instalaciones, sobre todo en el área de administración de tratamientos. Son más cómodas para aquellos que tienen que recibir tratamientos, están más humanizadas. La sala de tratamientos es notablemente de mejor calidad que la que teníamos en el Clínico. También ha mejorado para los profesionales que realizamos nuestra labor, atendemos en espacios más amplios y cómodos". 

 

-¿Sigue habiendo algo que mejorar? 

-"Áreas de espera, tenemos dificultad para gestionar horarios en los que se concentra mucha actividad, es difícil tener pacientes en un lugar cómodo, que no haya colas, es complicado que se sientan de forma cómoda. se han mejorado muchas cosas tanto en asistencia de las consultas como área de tratamientos, aunque tenemos algunos puntos que abordar para que los tiempos de espera de los pacientes sean más confortables, es una asignatura pendiente". 

 

-Habla de humanización, ¿cree que es suficiente? 

-"No. Ahora mismo empiezan a proliferar los programas de humanización no sólo para pacientes oncológicos, esto se ha demostrado que mejora el estrés emocional. Igual que se están implementando programas de ejercicio físico, deberíamos mejorar esto, debería formar parte de nuestra cartera de servicios. El paciente tiene que estar bien tratado, con los mejores recursos, pero también que se perciba una atención humana y de calidad. La humanización es un reto que debemos plantearnos en los próximos años".

 

"Decir que un día vamos a curar el cáncer es como decir que vamos a curar las infecciones"

 

-¿Cree que llegará algún día la vacuna o cura contra el cáncer? 

-"No. El cáncer no es una enfermedad, son más de 250. Iremos asistiendo a resultados en diferentes tipos de cánceres, algunos se curarán con más éxito o menos. Decir que un día vamos a curar el cáncer es como decir que vamos a curar las infecciones. Pues llegó el Covid y nos mandó a todos a la cruda realidad. Esto no es una única enfermedad, no es un único estadio. Iremos consiguiendo pequeñas victorias". 

"Nada de lo anterior es posible sin un equipo multidisciplinar que trabaja conjuntamente en el Comité de Cáncer de Mama (cirujanos, patólogos, radiólogos, oncólogos médicos y radioterápicos, ginecología, medicina nuclear, sin olvidar el papel esencial de le enfermería) donde se evalúan todos y cada uno de los casos diagnosticados en el Hospital".

 

0 Comentarios

* Los comentarios sin iniciar sesión estarán a la espera de aprobación
Mobile App
X

Descarga la app de Grupo Tribuna

y estarás más cerca de toda nuestra actualidad.

Mobile App