Tres tramos de ríos de Salamanca entrarán en la lista de reservas hidrológicas nacionales a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Se trata del Alagón, el rio de Candelario y el Barquillo. 

Este Ministerio para la Transición Ecológica ha sacado a consulta pública una lista de 67 reservas hidrológicas en todo el país (26 reservas naturales fluviales, 19 lacustres y 22 subterráneas) para que los ciudadanos aporten sus opiniones u observaciones al respecto. Durante los últimos meses, "todas las Confederaciones Hidrográficas han iniciado el proceso de revisión de los Planes hidrológicos para el tercer ciclo de planificación (2022-2027). Fruto de estos trabajos, se han identificado una serie de tramos fluviales, lagos y aguas subterráneas cuyas características les hacen meritorios para ser catalogados como reservas hidrológicas", recoge la documentación del Ministerio. El objetivo final de esta iniciativa es "preservar sin alteraciones aquellos tramos de ríos con escasa o nula intervención humana" y ahí es donde destacan esos tres representantes de Salamanca.

La Confederación Hidrográfica del Tajo sugiere proteger un tramo de 25,16 kilómetros en la cabecera del Alagón. Su estado general es "bueno" y también un "ejemplo representativo de lo tipología de ríos Gargantas de Gredos- Béjar en Castilla y León". El curso fluvial de la reserva "constituye un hábitat potencial de múltiples especies, con gran variedad ecológica fluvial que muestra un ambiente natural bien conservado en el que se encuentra una fauna variada" como la cigüeña negra, la libélula 'Oxygastra curtisii', "ambas consideradas como Vulnerables en el Catálogo Español de Especies Amenazadas" y el odonato Macromia splendens, catalogada en peligro de extinción.

En cuanto las especies piscícolas, "el sistema fluvial constituye un hábitat potencial de múltiples especies que pueden ser esenciales para el proceso de diagnóstico del estado de las masas de agua". En definitiva, concluye el estudio "se considera que el río Alagón mantiene una importante representatividad y en un alto grado de naturalidad que otorgan a este curso fluvial de un paisaje de gran belleza y singularidad hidromorfológica que le hacen merecedor de ser declarado como Reserva Natural Fluvial".

Riqueza faunística

Las valoraciones del río de Candelario (también citado como Cardal) y el Barquillo son similares. Ambas, de hecho, comparten una sola ficha informativa. "El curso fluvial de la reserva, de gran valor paisajístico, constituye un hábitat potencial de múltiples especies, con gran variedad ecológica fluvial que muestra un ambiente natural bien conservado en el que se encuentra una fauna variada" con "especies relevantes como el desmán ibérico (Galemys pyrenaicus), catalogada en Peligro de Extinción según el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (CCEA) y el nóctulo mediano (Nyctalus noctula) considerada como vulnerable", entre otros mamíferos, reptiles, anfibios, aves y peces relevantes. De nuevo, su "gran belleza y singularidad hidromorfológica" les harían merecedores de ser Reserva Natural Fluvial.

El tramo que el Ministerio desea incluir en la lista de reservas fluviales asciende a 10,51 kilómetros para ambos ríos, desde su nacimiento al sur de la provincia hasta pasado Candelario, donde ambos desembocan en el río Cuerpo de Hombre.

El periodo para solicitar cambios o sugerir modificaciones al Ministerio concluye el próximo 26 de mayo.