Emoción, 'vivas' y aplausos en el traslado del sepulcro de Santa Teresa en Alba de Tormes

La villa ducal ha vivido el último de los actos previstos tras la apertura de su sepulcro el pasado mes de agosto y la veneración pública de los últimos quince días

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Emoción, 'vivas' y aplausos en el traslado del sepulcro de Santa Teresa en Alba de Tormes
Traslado del sepulcro de Santa Teresa (Fotos: A. Santana)
El autor esIsabel Andrés Rodríguez
Isabel Andrés Rodríguez
Lectura estimada: 3 min.
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Alba de Tormes tenía este lunes una cita con la historia y se notaba en el ambiente. Desde mucho antes de que comenzara el traslado del sepulcro de Santa Teresa la plaza que lleva el nombre de la Patrona albense ya estaba llena de vecinos y fieles para participar en el último de los actos previstos tras la apertura del sepulcro el pasado mes de agosto y los quince días de veneración pública de sus restos. Y es que este lunes los restos de la Santa volvían a la urna de plata y al camarín alto donde habitualmente descansan.

La jornada ha comenzado con la firma del acta notarial del evento, que se ha introducido dentro de la urna antes de cerrarla. Además, se ha retirado el hábito de la Santa, que se colocará en la sala de reliquias del museo carmelitano de la villa ducal, y se le ha colocado un "hábito sencillo", según ha explicado el prior de los Carmelitas de Alba de Tormes y Salamanca, el padre Miguel Ángel González. Tras ello, se ha procedido al cierre de la urna con las llaves: "la llave del padre general ha sido utilizada por él mismo, la llave de las Carmelitas Descalzas ha sido utilizada por la madre priora, la llave del duque de Alba la ha utilizado la alcaldesa en representación de la Casa Ducal y de la villa y la llave del rey la ha utilizado el padre prior de los Carmelitas Descalzos de Ávila en representación de la Casa Real", ha explicado el prior.

"Ha sido un momento de especial emoción que ha contado con la presencia de Carmelitas Descalzos llegados desde distintos puntos de España y de otros países del mundo y un momento de intensa oración en un silencio y respeto extraordinarios", ha asegurado el padre Miguel Ángel.

Camarín alto donde reposan los restos de Santa Teresa (Foto: A. Santana)

Una vez cerrada la urna, ha comenzado el traslado desde la iglesia de La Anunciación, donde ha estado durante la veneración pública, para regresar al camarín alto del templo. Un traslado que ha recorrido algunas calles de la villa ducal seguido de cientos de fieles que no han querido perderse el momento. Así, pasados unos minutos de las 11:10 horas, las campanas comenzaban a sonar y se abrían las puertas del templo para dar paso a una procesión en la que ocho carmelitas descalzos de distintos conventos de España portaban a hombros el sepulcro. Momento en el que se desbordaba la emoción, comenzaban los aplausos y los 'vivas' a Santa Teresa y se entonaba el himno a la Santa.

La procesión ha estado acompañada por la banda de música de Alba de Tormes, por el personal de organización y los cientos de albenses que han querido acompañar el recorrido. Además, han formado parte del cortejo las madres carmelitas de Alba de Tormes.

Llaves con las que se ha cerrado el sepulcro

Tras recorrer el centro de la villa ducal, el sepulcro ha regresado al templo y a su camarín alto, donde las hermanas han celebrado un acto privado antes de proceder al cierre definitivo.

Con ello se cierran quince días de "intensa espiritualidad, de devoción, de fe. Han sido dos semanas de mucho trabajo, muy intenso y a la vez mucha alegría y mucho recogimiento". Ha sido este un momento histórico, una veneración pública por la que han pasado más de 90.000 personas en el periodo más amplio en el que los fieles han podido mostrar sus respetos a la Santa desde su muerte en 1528. Y es que es la tercera vez que se ha celebrado esta veneración, después de la que se produjo en 1760 durante unas horas y un día en 1914. Ahora han sido dos semanas en las que los restos de la Santa Andariega han sido venerados por los fieles de todo el mundo.

Se cierra así un trabajo que comenzó el pasado mes de agosto, con la apertura del sepulcro, para su estudio y restauración. Un estudio que ha permitido llevar a cabo diferentes trabajos para garantizar su conservación con trabajos como la limpieza de la urna sepulcral de Santa Teresa de Jesús, un estudio del hábito sepulcral, la restauración de los espacios laterales del retablo mayor de la Basílica dónde históricamente se han venerado las reliquias del corazón y el brazo de Santa Teresa de Jesús o la reconstrucción de su rostro.

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