También esgrimió unas tijeras y un destornillador. El incidente sucedió el pasado miércoles en Medina del Campo, aunque no había trascendido hasta hoy
Muere el niño de 11 años electrocutado hace una semana al subirse a una torre de alta tensión
Dos menores se subieron a la torre y uno de ellos resultó electrocutado en la localidad guipuzcoana de Usurbil
El menor que el pasado fin de semana resultó gravemente herido electrocutado al subirse a una torre de alta tensión en Usurbil ha fallecido, ha confirmado el Ayuntamiento de la localidad guipuzcoana. El niño, de 11 años, murió anoche en el vizcaíno hospital de Cruces, donde permanecía ingresado por las graves quemaduras que sufrió.
El suceso ocurrió sobre las seis de la tarde del sábado de la pasada semana, cuando dos menores, uno de ellos el niño fallecido, resultaron electrocutados al subirse a una torre de alta tensión situada en la zona de Errota Berri, en Usurbil.
En una nota, el Ayuntamiento de la localidad guipuzcoana ha transmitido sus condolencias a los familiares y allegados del fallecido.
Ha señalado que el menor se encontraba hospitalizado en la Unidad de Grandes Quemados del hospital de Cruces en estado grave, pero estable. Sin embargo, en los últimos días su estado de salud ha empeorado y ha fallecido.
El Consistorio ha indicado que "hoy es un día triste para el pueblo de Usurbil" por el fallecimiento del niño, que supone un "duro" golpe, "una desgracia tremenda".
En el comunicado, la alcaldesa de la localidad guipuzcoana, Agurtzane Solaberrieta Mesa, ha abogado por que se tomen medidas para que no vuelvan a suceder accidentes como el que ha costado la vida al menor.
El Ayuntamiento de Usurbil ha recordado que la Ertzaintza tiene abierta una investigación para esclarecer lo ocurrido y que el Consistorio mantiene su disposición a colaborar con dicho fin.
El arrestado, que no es el propietario del inmueble, alegó que le debían varios meses de alquiler
El hombre, de 50 años, tenía una orden de alejamiento en vigor y, tras ser detenido, fue internado en prisión
El joven, que trató de huir de la Policía, reconoció que no tenía prescripción ni receta para los medicamentos, cuyo valor en el mercado negro ronda los 755 euros








