Los contenedores marrones para restos orgánicos proliferan cada vez más por las calles de Salamanca. Las primeras unidades se colocaron hace un año en Garrido Norte y la Chinchibarra, a modo de experiencia piloto, y con el tiempo fueron repartiéndose por Garrido Sur y Salesas.

La meta del Ayuntamiento es distribuirlos, sin prisa pero sin pausa, por toda la ciudad. Los barrios elegidos para seguir con la expansión son Prosperidad, Rollo, San Isidro (alrededores de la plaza de Trujillo) y Estación (distrito que abarca calle como el paseo de los Madroños, la avenida de París y calle de la Radio). Según el Consistorio son "las próximas zonas" donde se colocarán los contenedores marrones.

El proceso no tiene fecha aún. En el Ayuntamiento aclaran que no se puede hacer de un día para otro porque hay que decidir si se colocan en islas de reciclaje, si ocupan plazas de aparcamiento... el proceso de elección de la ubicación, de hecho, se hace de la mano de la Policía Local.

La concejalía de Medio Ambiente aspira a instalar 475 depósitos marrones en toda la capital. Por el momento ya se han distribuido un centenar en los citados barrios de Garrido, Salesas y Chinchibarra, en el norte de Salamanca.