Cáritas Diocesana de Salamanca ha lanzado un grito de aviso sobre el problema de "hacinamiento" que, según ellos, sufren cientos de vecinos de la ciudad a causa del complicado momento del mercado de la vivienda. La ONG ha ayudado este año a casi 1.400 familias a afrontar difucultades con los alquileres y suministros y ha advertido de que dichas complicaciones "se van afianzando" año tras año, conviertiendo un serio problema "en algo normal".

El delegado episcopal de Cáritas, Juan Pedro Melgar, y la técnico de área de acogida y atención primaria, Rosa Rodríguez, han insistido en que el hacinamiento se está convirtiendo en "una estrategia de supervivencia forzada" que "no debe normalizarse". Conocen casos de familias enteras viviendo en habitaciones "como si fuera un apartamento", en las que el desarrollo personal, la intimidad familiar o el estudio de los menores se convierten en tareas imposibles y los conflictos y el deterioro de la salud mental están a la orden del día. "La solución al problema no puede ser tener a varias familias en una vivienda". Ésta es "un derecho básico" que debe convertirse en algo "real".

Los porqués de este deterioro responderían, según el análisis de Cáritas, al aumento sostenido del precio del alquiler ("un 50% en la última década, pasando de 6,2 euros por metro cuadrado a 9,5 euros"); al endurecimiento de los requisitos para arrendar una vivienda, como disponer de dos sueldos; al veto a las parejas con menores o a los reparos a alquilar a inmigrantes o personas con bajos ingresos. Esos factores, insisten, contribuyen a 'empujarlos' hacia los márgenes del mercado.

Cáritas Diocesana ha ayudado este 2025 a 1.393 familias con problemas de vivienda, aportando ayudas directas a 725 de ellas (en el resto ejerció labores de acompañamiento, búsqueda de residencia, gestiones, etc.) por un importe total de casi 683.000 euros. En cuanto a los perfiles, hay de todo: parejas jóvenes vulnerables con hijos, trabajadores precarios que necesitan ayudas complementarias, familias monoparentales, enfermos crónicos, etc.

Por estos motivos, Cáritas ha lanzado una nueva Operación Vivienda 2025, tanto para alertar sobre el complicado momento de ciendos de familias salmantinas como para recabar fondos con los que poder ayudar a quienes acuden a ellos (el año pasado obtuvieron 53.222 euros). Para contribuir, pondrán a la venta un 'totebag' solidario a 5 euros, disponible en la sede de Cáritas y recibirán el importe de las colectas de las parroquias de Salamanca durante este fin de semana. También recogen donativos a través de Bizum (código 38119) o mediante transferencias bancarias. Finalmente, lanzarán un anuncio a través de sus redes sociales con el lema 'Donde caben 2, caben... 10, pero ¿deberían?", para invitar a reflexionar a la ciudadanía.

La solución, más allá de lo que puedan aportar las ONG, pasaría, según Cáritas, por conceder ayudas directas al alquiler, fomentar un parque público de viviendas con alquileres asequibles, contribuir a que las viviendas vacías salgan al mercado mediante planes de alquiler seguro o regularizando los alquileres turísticos, entre otras.