Recoletas Salud Carbajosa volvió a demostrar que en su pabellón es un equipo difícil de batir. Los de Manuel A. Rodríguez dominaron el marcador durante todo el encuentro, aunque sin llegar a disfrutar de una comodidad real hasta los instantes finales. La garra local en el último cuarto fue determinante para cerrar un trabajado 81-71.

El duelo comenzó marcado por la tensión y los errores. Ambos equipos arrancaron con un triple, pero el ritmo ofensivo se ralentizó enseguida. Carbajosa necesitó del acierto de Jorge Morán, especialmente inspirado desde el perímetro, para evitar que el partido se les escapara cuesta abajo. Su triple sobre la bocina del descanso puso el 32-32 que llevaba la igualdad al intermedio.

Tras la pausa, los locales regresaron con una velocidad más. La circulación mejoró y aparecieron los lanzamientos exteriores: Morán, Ekaitz y Jordan desataron a la afición con varios triples consecutivos. Sin embargo, Ulacia ZKE respondió con facilidad en la pintura y un 2+1 visitante devolvió la igualdad al marcador (49-49). Fue entonces cuando Doudou, contundente en la zona, permitió a Carbajosa recuperar la iniciativa.

El último cuarto fue el escenario donde los locales mostraron su mayor convicción. Con 60-53 y siete minutos por jugar, parecía que el partido podía romperse, y un triple de Jordan dio la máxima ventaja (+10). Aun así, Ulacia ZKE no se rindió y obligó a Carbajosa a seguir afinando su puntería. Un nuevo acierto de Ekaitz desde fuera sostuvo la renta cuando más apretaba el conjunto vasco.

Con el marcador a favor, los salmantinos gestionaron con firmeza el último minuto, asegurando la victoria desde los tiros libres.