La Unidad de Patología Mamaria (UPM) del hospital de Salamanca suma nuevos integrantes a sus filas.

La UPM está coordinada por Isabel Silva y depende del servicio de Cirugía General. Lleva más de 25 años funcionando y hasta ahora contaba con profesionales de Cirugía General, Oncología Médica, Oncología Radioterápica, Diagnóstico por imagen, Medicina Nuclear y Anatomía Patológica, a los que ahora se añaden especialistas de los servicios de Ginecología y Cirugía Plástica. El objetivo, explican desde el hospital, es "proporcionar una atención integral a las pacientes con tumores de mama" y brindarles "el mejor tratamiento, implementando así técnicas novedosas y mayores alternativas terapéuticas".

Los facultativos de Ginecología que se han sumado a la unidad participan en todas las actividades de ésta (comité multidisciplinar, quirófanos, consultas, producción científica…) y su intervención ha permitido crear una nueva consulta para coordinar las solicitudes de conservación de óvulos de pacientes oncológicas, de tratamientos hormonales y de terapias que reducen los efectos secundarios de los tratamientos oncológicos.

En cuando a Cirugía Plástica, por su parte, interviene en aquellos casos que requieren de reconstrucciones complejas, simetrizaciones o en el manejo de las complicaciones de las terapias quirúrgicas y oncológicas. Con ello, se han reducido las secuelas quirúrgicas para este tipo de pacientes, mejorando así su calidad de vida.

Resto de especialidades

Desde la parte de Cirugía General, en la actualidad, el Complejo Asistencial
Universitario de Salamanca es el único centro de la comunidad autónoma en el que se realiza el abordaje mínimamente invasivo de la patología mamaria.

Por parte del servicio de Diagnóstico por imagen se está realizando en esta
unidad el tratamiento local de tumores pequeños mediante radiofrecuencia en
personas de edad avanzada, evitando la realización de intervenciones quirúrgicas mayores para este tipo de pacientes.

Se ha retomado también la actividad específica de Patología Mamaria en el Hospital Virgen del Castañar de Béjar, implementando una consulta de alta resolución cada mes, en la que se valora a la paciente y se realizan los estudios radiológicos necesarios de forma inmediata, obteniéndose el diagnóstico en una sola cita médica.

Además, junto al servicio de Medicina Nuclear se ha elaborado un protocolo
clínico para realizar pronto un PET-TAC a aquellas pacientes que lo requieran.
Mediante esta técnica de imagen se puede obtener una mejor estadificación inicial y una valoración más efectiva de la respuesta a los tratamientos oncológicos administrados.

Asimismo, el añadido de una enfermera gestora de casos ha sido esencial para el devenir de la UPM, ya que coordina a todos los integrantes y ofrece apoyo y un contacto directo a todas las pacientes.