Los integrantes del Centro de Recepción de Fauna Salvaje 'Las Dunas' soltaron este domingo a algunas de las aves que han curado y cuidado durante las últimas semanas. Este acto atrajo la mirada de varios vecinos de Santa Marta de Tormes, quienes no dudaron en acudir a la isla del Soto para disfrutar de este momento.

La suelta sirvió como una formación teórico-práctica en la que se explicó a los asistentes cuestiones básicas para este tipo de situaciones. Dos cigüeñas, un autillo, dos cernícalos y dos vencejos fueron los animales que volvieron a la libertad.

Javier Macías, voluntario del centro de recuperación de fauna y vecino de Santa Marta, explicó algunas características de las aves reintroducidas en el medio salvaje, como por ejemplo la señal característica de las cigüeñas jóvenes que tienen el pico más oscuro, el autillo, que es el búho más pequeño de la península, los vencejos, que son una de las aves mejor adaptadas al medio aéreo, ya que pueden pasarse semanas sin tocar el suelo, o el cernícalo, una rapaz de pequeño tamaño que puede suspenderse en el aire con su peculiar vuelo y aleteo.

Los voluntarios recordaron que reciben unos mil ingresos al año y el proceso que tienen que seguir los animales que reciben en Las Dunas, las curas e incluso operaciones para recuperarlos de sus lesiones, enseñarlos a volar y a cazar, en el caso de los ejemplares más jóvenes, y prepararlos para volver a introducirlos en el medio natural en un porcentaje del 65-70%.