El Gobierno acaba de aprobar un paquete de medidas para contener la crisis de precios desencadenada por los costes de la energía y su contagio a la inflación. Las medidas incluyen desde la prórroga de la bonificación de los 20 céntimos a una nueva ayuda de 200 euros para compensar a las familias con menos recursos, pero inciden de manera especial en el transporte con un claro incentivo a las modalidades colectivas: bus urbano e interurbano y trenes, fundamentalmente. La medida consiste en la rebaja general del precio del transporte, y aunque habrá que detallarla, afecta a los abonos y no a los billetes 'ida y vuelta' que, por otro lado, son los menos demandados en este tipo de transportes.

La reducción se aplicará a partir del 1 de septiembre del 50% del precio de todos los abonos mensuales y de cualquier tipo de abono de empresas de transporte estatal, como Renfe. Además, se reducirá el 30% para los abonos de las modalidades de transporte que dependen de ayuntamientos y comunidades autónomas, descuento que pueden ampliar con recursos propios hasta el 50%. Esta rebaja tendrá un coste para administraciones y empresas que por lógica asumirá el Estado: el Gobierno tiene previsto 221 millones de euros para financiarlo mediante un crédito extraordinario, según el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbanas. 

La medida está a la vuelta de la esquina y en poco más de dos meses estará operativa, lo que puede afectar de manera importante al panorama del transporte colectivo en Salamanca. El bus urbano de la capital, el transporte metropolitano entre municipios y las principales conexiones ferroviarias están en el centro de esta medida. Así va a quedar la situación.

Bus urbano: todavía más barato

El autobús urbano de Salamanca ya es uno de los más baratos de España. De hecho, un viaje sale desde 0,59 euros con bonobús pero puede ser más barato todavía usando la tarjeta mensual, el abono joven o si eres beneficiario de una tarjeta especial. Los precios llevan años congelados y un billete simple cuesta 1,05 euros, pero es la peor referencia porque la gran mayoría de usuarios recurren a los diferentes abonos y tarjetas.

La tarjeta de usuario o bus-ciudad cuesta 22,05 euros al mes. La tarjeta joven de bus ciudad para menores de 30 años o estudiantes sale por 14 euros al mes. Y los beneficiarios de la tarjeta especial, como los mayores, viajan desde 0,03 céntimos. La rebaja del 30% reduce todavía más esos precios y un mes entero de viajes con el 'bonobús' más habitual costaría unos 15 euros. Habrá que ver si el consistorio amplía la rebaja al 50% o la considera ya suficiente, y cómo compensa eso el Estado.

Bus metropolitano: relevo en la rebaja 

En estos momentos el bus metropolitano de Castilla y León, competencia y gestión de la Junta, ya tiene en vigor una importante rebaja aprobada por la administración regional como parte de sus medidas para contener la crisis de precios. El bus interurbano da servicio a numerosos municipios de la provincia (1,83 millones de usuarios) y ahora mismo se benefician de un 15% de descuento.

Entró en vigor el 1 de junio por tres meses, es decir, hasta finales de agosto: si la nueva rebaja entra el 1 de septiembre tomaría el relevo con un descuento de, al menos, un 30% que podría llegar al 50%. El abono de un mes cuesta 37 euros sin el descuento actual y pasaría a 25 con un 30% de descuento y a 18 con el 50%.

Habría que ver si la medida afecta también a las líneas interurbanas, el coche de línea, que actualmente son concesiones estatales. El viaje entre Salamanca y Madrid cuesta unos 35 euros.

Trenes

Las conexiones ferroviarias también están afectadas por esta futura rebaja que toca especialmente al trayecto entre Salamanca y Madrid. Ahora mismo se puede viajar en Alvia por 40 euros con el billete simple, pero entre 15 y 25 euros con los diferentes abonos y tarjetas. Ya es más barato que desplazarse en coche para ir a la capital y a partir del 1 de septiembre lo será todavía más.