Cáritas Diocesana de Ciudad Rodrigo ha desplegado su campaña de Navidad 2025 en los siete arciprestazgos de la diócesis civitatense, aprovechando los retiros celebrados antes de finalizar el año para acercar su mensaje de forma directa a las comunidades parroquiales. En estos encuentros, la entidad no solo ha dado a conocer el lema de la campaña -"Hagamos que tener una vida digna deje de ser cuestión de suerte"—, sino que también ha compartido los principales datos del último Informe FOESSA.

Desde Cáritas subrayan que la Navidad es un tiempo propicio para reflexionar sobre la dignidad humana y para tomar conciencia de las desigualdades que persisten en la sociedad. La campaña invita a vivir estas fechas de forma coherente con los valores de la solidaridad y el cuidado, tanto a nivel personal como comunitario, recordando que la dignidad no debería depender de circunstancias azarosas.

La entidad recuerda que la Campaña de Navidad, junto a la del Día de Caridad (Corpus Christi), es uno de los dos grandes momentos del año en los que se hace un llamamiento especial a la colaboración económica, fundamental para sostener los programas de lucha contra la pobreza que Cáritas desarrolla a través de parroquias, proyectos y centros diocesanos.

La labor social de Cáritas Diocesana Ciudad Rodrigo se refleja en las cifras de este año. Desde enero hasta el 26 de noviembre de 2025, la organización ha atendido a 584 personas pertenecientes a 375 hogares, realizando 4.225 intervenciones. En total, se han destinado 113.551,94 euros en ayudas, principalmente para el sostenimiento familiar y becas de formación, gestionadas y supervisadas por profesionales del trabajo social.

Durante la presentación de la campaña, Cáritas también ha puesto el foco en los datos del Informe FOESSA en Castilla y León, que advierte de una realidad preocupante: tener empleo ya no garantiza salir de la pobreza, el acceso a la vivienda se ha convertido en un factor de empobrecimiento y muchas familias quedan fuera de los sistemas de protección social.

En la comunidad autónoma, la exclusión social afecta a 352.000 personas, lo que supone el 14,9 % de la población, y desde 2018 28.000 personas más han pasado a esta situación. El informe constata un retroceso en los procesos de integración y un aumento de la exclusión moderada, reflejo de una sociedad más frágil tras la pandemia.

Con esta campaña, Cáritas insiste en que "mientras haya personas, hay esperanza", y anima a la ciudadanía a cultivar la cercanía, la escucha y el compromiso solidario. Un mensaje que cobra especial sentido en el tiempo de Adviento, entendido como una oportunidad para detenerse, mirar con otros ojos y apostar por una sociedad más justa, donde la esperanza se construya desde la dignidad.