Salamanca se vistió de celebración para conmemorar los 50 años de FCC Medio Ambiente en la ciudad. El evento, celebrado en el emblemático Casino de Salamanca, reunió a autoridades institucionales y representantes del tejido empresarial y social, en una velada que combinó memoria, reconocimiento y visión de futuro. La compañía, que forma parte de la vida cotidiana de los salmantinos desde 1975, celebró medio siglo de compromiso, esfuerzo y servicio público.

El acto fue inaugurado por el consejero delegado de FCC Medio Ambiente, Íñigo Sanz, quien destacó los pilares esenciales del actual contrato municipal, suscrito por doce años y orientado -junto al Ayuntamiento- a avanzar hacia "un entorno urbano más limpio, en una ciudad innovadora" como la capital del Tormes. Subrayó, además, la relevancia de la sostenibilidad social dentro de la empresa: "Las personas son nuestro mejor activo, por ello tenemos un compromiso real con la igualdad y la inclusión".

La intervención de Sanz sirvió para contextualizar la evolución de FCC en Salamanca: una trayectoria marcada por la modernización del servicio, la incorporación de nuevas tecnologías y una colaboración permanente con las administraciones públicas, que han exigido siempre el máximo nivel. Esta relación -firme, exigente y constructiva- ha convertido a la ciudad en un referente de limpieza urbana y gestión ambiental.

Huella construida junto a la ciudad

FCC Medio Ambiente llegó a Salamanca en 1975 y, desde entonces, ha sido testigo directo de su desarrollo urbano y social. Ha acompañado a varias generaciones de salmantinos, contribuyendo a un entorno más cuidado y sostenible. Una relación de medio siglo que se recordó con la proyección audiovisual '50 años en Salamanca', un recorrido visual por la historia compartida entre la empresa y la ciudad.

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, felicitó a la compañía por su aniversario y reafirmó su compromiso con una ciudad "culta y limpia". Subrayó que la limpieza urbana es una de las señas de identidad que más orgulloso le hacen sentir, tanto como alcalde como ciudadano. "Es algo que los visitantes destacan como primera impresión positiva", afirmó, haciendo además mención a la baja contaminación del aire en la capital, fruto del cuidado con el que FCC trata el entorno urbano. "Gracias por vuestra dedicación para que Salamanca sea un ejemplo por su limpieza y por su respeto al patrimonio".

Por su parte, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, puso a FCC como ejemplo de colaboración público-privada capaz de impulsar proyectos innovadores, modernos y sostenibles"al servicio de las personas. Subrayó que la compañía contribuye no solo a crear entornos urbanos "más habitables, más limpios y mejor gestionados", sino también a generar riqueza y empleo en la ciudad y en toda la Comunidad. Agradeció el compromiso del Grupo FCC -que también celebra su 125º aniversario- y del tejido empresarial de Castilla y León con la seguridad laboral, la igualdad de oportunidades y la integración de personas con capacidades diferentes.

La inclusión, el corazón del futuro

La celebración sirvió también para recordar el camino recorrido y proyectar el futuro de la empresa. Ese futuro se cimenta en una parte esencial de la identidad de FCC: la inclusión social.

La compañía ha entendido desde hace décadas que su labor no puede desligarse de las personas. En 2014 dio un paso decisivo con la creación de FCC Equal CEE, una estructura independiente surgida para reforzar su estrategia de responsabilidad social corporativa. El objetivo era claro: promover y visibilizar la inclusión laboral de personas con discapacidad mediante un modelo que garantice empleos estables, justos y adaptados, en los que puedan desarrollar autonomía, independencia y oportunidades reales.

Hoy FCC Equal CEE está presente en siete comunidades autónomas y emplea a más de 700 personas con discapacidad, más del 70% de ellas con discapacidad severa. Cada uno de esos trabajadores no es únicamente parte de la plantilla: representa un ejemplo de superación y capacidad. La iniciativa demuestra que cuando se abren oportunidades laborales, no solo cambia la vida de una persona, sino también la sociedad que la rodea.

Su enfoque va más allá de la contratación. Equal crea entornos inclusivos, adapta procesos y ofrece apoyos personalizados para que cada empleado alcance su máximo potencial. Las Unidades de Apoyo -equipos profesionales especializados- acompañan a los trabajadores en lo laboral, lo social y lo personal. Ese modelo ha convertido la diversidad en una ventaja competitiva: un equipo amplio, plural y sólido que demuestra cada día el valor de un entorno laboral donde talento y respeto conviven.

Reconocimiento y emoción

La noche avanzó con la intervención de Irene Villa, cuyo testimonio vital emocionó a los asistentes. La periodista y activista compartió con el público su experiencia de superación ante las adversidades, convirtiendo su charla en una llamada a la resiliencia, a la empatía y a la fuerza transformadora de las oportunidades.

El acto culminó con un homenaje sentido y merecido: el reconocimiento a Alfredo Sanchidrián Ridaura por una trayectoria marcada por la constancia, la responsabilidad y el liderazgo desde el ejemplo como compañero fiable, el trabajador incansable y respetado, el que deja huella en el equipo. "Este reconocimiento es un pequeño gesto comparado con todo lo que has aportado", se expresó en el escenario antes del aplauso generalizado que dio pie a cerrar la noche con un cóctel para todos los presentes.