La hostelería de Salamanca, motor económico, social y turístico de la provincia, se enfrenta a la posibilidad de un nuevo impulso con el Proyecto Integral para la Renovación y el Desarrollo de la Hostelería, presentado por la Asociación de Hostelería Charra, integrada en CEOE CEPYME Salamanca. Bajo el lema 'Salamanca se saborea', la iniciativa busca modernizar el sector y garantizar su continuidad tanto en la ciudad como en los municipios rurales.

El proyecto surge, según afirman, tras un análisis de la situación actual, marcada por el aumento de costes, la presión fiscal, la pérdida de establecimientos y las dificultades de relevo generacional. La iniciativa plantea construir un modelo estable que combine sostenibilidad, convivencia y actividad económica.

Entre sus propuestas se incluyen la actualización del marco fiscal y de la Ordenanza de Terrazas para facilitar la labor de los empresarios, la modernización de la Feria de Día y la creación de una Mesa Técnica Permanente entre Ayuntamiento y sector para coordinar criterios y normativas. Además, se propone un Plan Municipal de Hostelería 2025–2030 que estructure la política municipal en torno a cinco ejes: normativa, fiscalidad, sostenibilidad, formación y empleo, y dinamización turística.

La hoja de ruta también presta especial atención al medio rural, donde los bares actúan como puntos de encuentro esenciales en municipios envejecidos y en riesgo de despoblación.

El proyecto plantea estrategias específicas para cinco zonas de la provincia, fomentando la digitalización, la formación adaptada a la realidad rural, la conexión entre productores y hosteleros mediante un sello de calidad y el fortalecimiento del turismo gastronómico. Asimismo, se contempla la creación de un Consejo Provincial de Hostelería y un Plan Provincial 2025–2029 para reactivar bares, apoyar reaperturas y garantizar la continuidad de los negocios.

Finalmente, el proyecto busca consolidar la identidad culinaria de Salamanca como herramienta de desarrollo turístico, mediante rutas gastronómicas, señalética, calendario de eventos y promoción conjunta entre hostelería, comercio y cultura. La formación y profesionalización del sector también son ejes esenciales, con programas de prácticas, bolsa laboral y alianzas estables entre empresas y centros educativos.

Con 'Salamanca se saborea', la hostelería pretende no solo adaptarse a los retos actuales, sino convertirse en un motor de cohesión social, desarrollo económico y atractivo turístico para toda la provincia.