La selección española femenina cerró este domingo el torneo amistoso de La Línea de la Concepción con una derrota ajustada ante Francia (68-72), en un encuentro que dejó sensaciones agridulces: una primera parte muy sólida, un tercer cuarto para olvidar y el paso adelante de varias jóvenes, entre ellas Iyana Martín, y la regularidad de Andrea Vilaró, ambas integrantes de Perfumerías Avenida.

España arrancó el duelo con la firme intención de resarcirse del tropiezo inicial ante Italia y lo hizo desde la defensa. Las de Miguel Méndez mostraron una versión mucho más intensa atrás y encontraron fluidez ofensiva para dominar el primer acto (17-11). El guion se mantuvo en el segundo cuarto: acierto exterior, ritmo alto y ventajas que llegaron a los diez puntos a cuatro minutos del descanso, antes de ampliarse hasta un ilusionante 37-25.

Sin embargo, tras el paso por vestuarios llegó el vuelco del partido. Francia elevó su nivel físico, presionó líneas de pase y comenzó a castigar desde el perímetro. España, demasiado atascada en ataque, encajó un parcial demoledor de 16-0 que permitió a las galas tomar el mando antes del último cuarto.

El acierto exterior francés —con ocho triples en los dos últimos periodos— mantuvo a España a remolque. Aun así, el combinado nacional mostró orgullo y logró colocarse a solo dos puntos en el minuto final. Pero un triple decisivo de Pauline Astier sentenció el choque para las francesas.

En el capítulo individual, España contó con una notable aportación de Iyana Martín, que volvió a demostrar personalidad en pista, sumando 16 puntos y asumiendo responsabilidad ofensiva en los momentos más delicados. Por su parte, Andrea Vilaró, siempre fiable, añadió 3 puntos y trabajo silencioso en ambos lados de la cancha. 

El torneo deja deberes, pero también certezas: España posee talento joven en crecimiento, experiencia consolidada y una base que, con ajustes, puede competir de tú a tú con potencias como Francia.