El servicio de bomberos de Salamanca estrena camión nodriza, un vehículo autobomba con capacidad para 7.800 litros, ampliable hasta 19.800 litros mediante una balsa adicional sita en la parte superior.

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha explicado que este vehículo supone "un salto cuantitativo muy importante", porque hasta ahora la ciudad contaba con cinco camiones de entre 2.000 y 3.000 litros, además de otros dos con escalas y un brazo articulado. El nuevo vehículo, con 7.800 litros 'de serie' brinda a los bomberos la posibilidad de abastecerse en cualquier punto de Salamanca, especialmente fuera del casco urbano o en zonas industriales, donde el suministro de agua a través de la red de hidrantes puede ser más limitado. También puede emplearse como 'noria' para aportar agua a dos camiones autobomba simultáneamente o alimentar a las escalas para trabajar en alturas elevadas. Una 'navaja suiza', en pocas palabras.

El jefe del servicio, Damián Ramos, ha aclarado que el camión destaca por su "versatilidad" porque puede funcionar por sí solo y porque "garantiza" el aporte de agua si los hidrantes fallan o los bomberos necesitan más caudal. "Era una de las prioridades que teníamos", ha añadido. Es un camión que permite "afrontar con garantías cualquier reto", como un hipotético incendio en un vehículo eléctrico, por ejemplo, que puede necesitar hasta 20.000 litros de agua.

Carbayo, finalmente, ha recordado que el servicio de bomberos y la Policía Local son "los dos servicios más valorados" en las encuestas municipales de satisfacción que elabora el Consistorio. "Estamos más seguros gracias a este tipo de operaciones", en alusión a la adquisición del camión, "y seguimos mejorando". 

El coche autobomba ha costado 356.000 euros, subvencionado al 75% dentro del proyecto de cooperación transfronteriza Interreg. Los bomberos aún no han tenido que emplearlo en ninguna intervención.