El sindicato CCOO alerta sobre la situación de la sanidad penitenciaria en España, que a su juicio "atraviesa un momento crítico y el Centro Penitenciario de Topas no es una excepción".

La central sindical señala que "según datos oficiales del Ministerio del Interior, sólo se cubren en torno al 30% de las plazas de médicos en las cárceles, una realidad que tiene una traducción directa en el día a día de los centros penitenciarios".

De acuerdo a CCOO, el centro de Topas "cuenta con nueve plazas de médico establecidas en la Relación de Puestos de Trabajo", pero "sólo hay dos. La mayoría de ellas se encuentran vacantes, lo que provoca una sobrecarga asistencial insostenible y una merma evidente en la calidad de la atención sanitaria". La situación, siempre según CCOO, es un calco respecto al resto del país (152 plazas cubiertas y 355 vacantes).

Esta "falta estructural de facultativos obliga a depender en exceso del personal de enfermería, habiéndose sustituido la asistencia médica de atención primaria por una asistencia de urgencia", insisten. Las consecuencias son falta de atención adecuada a internos con enfermedades crónicas, carencia de seguimientos médicos y riesgo para la seguridad en los centros. 

El sindicato reclama una mejora en las condiciones laborales y retributivas y la cobertura "inmediata" de las plazas vacantes. "La sanidad penitenciaria no puede seguir siendo el eslabón más débil del sistema público" porque están en juego tanto la salud de los reclusos como "la seguridad y las condiciones de trabajo de quienes prestan servicio en los centros penitenciarios".