La gran apuesta comercial llega con Tron: Ares, tercera entrega de la saga de ciencia ficción que comenzó en 1982. Protagonizada por Jared Leto y dirigida por Joachim Rønning, la cinta sigue a Ares, un programa informático enviado al mundo real, en lo que supone el primer contacto entre humanos e inteligencia artificial. Visualmente ambiciosa, busca recuperar el espíritu del clásico original y su estética futurista.

El director Darren Aronofsky se aleja de su habitual tono oscuro con Bala perdida, una historia ambientada en la Nueva York de los años 90. Protagonizada por Austin Butler y con la participación del puertorriqueño Bad Bunny, la película mezcla humor y drama en una lucha por la supervivencia dentro del submundo criminal.

También desde Estados Unidos llega Una casa llena de dinamita, lo nuevo de Kathryn Bigelow, quien vuelve a explorar la tensión política y militar. Con un elenco coral encabezado por Idris Elba, Rebecca Ferguson y Jason Clarke, la película narra, desde tres puntos de vista, los 19 minutos en los que el gobierno estadounidense debe decidir cómo responder ante un misil nuclear de origen desconocido.

Por su parte, cierra definitivamente la historia de los Crawley y sus sirvientes. Ambientada en los años 30, esta despedida cinematográfica dirigida por Simon Curtis presenta un tono más melancólico, entre los cambios sociales y los escándalos familiares que amenazan a la aristocracia británica.

Potencia española y europea

El cine español aporta algunas de las propuestas más originales de la semana. En el terreno del terror destaca Vieja loca, protagonizada por Carmen Maura y Daniel Hendler, sobre un hombre que debe cuidar a la madre senil de una exnovia. Coproducción hispano-argentina con J.A. Bayona como productor, marca el debut en la dirección de Martín Maguregui y llega tras su paso por Sitges.

Desde una perspectiva histórica, La tregua, de Miguel Ángel Vivas, sitúa a Miguel Herrán y Arón Piper en bandos opuestos dentro de un gulag soviético que reunió a republicanos y franquistas durante la Segunda Guerra Mundial. Inspirada en hechos reales, combina drama bélico y reflexión sobre la supervivencia y la reconciliación.

El cine vasco también se hace presente con Karmele, de Asier Altuna, basada en la novela de Kirmen Uribe La hora de despertarnos juntos. Narra la historia real de una enfermera exiliada tras la Guerra Civil que huye de Francia a Venezuela para escapar del nazismo.

Completan la oferta europea Jugar con fuego, de las hermanas Delphine y Muriel Coulin, sobre un joven atraído por la extrema derecha en la Francia contemporánea, y Mario, comedia negra de Guillem Miró que explora las falsedades y secretos en las relaciones de pareja.

Entre la historia y la fe

El romanticismo literario cobra vida en Mi ilustrísimo amigo, dirigida por Paula Cons, que recrea la relación epistolar entre Benito Pérez Galdós y Emilia Pardo Bazán, interpretados por Paco Déniz y Lucía Vega. Un retrato íntimo de dos gigantes de la literatura española.

Por último, la animación llega con Jesús, luz del mundo, una producción estadounidense que repasa la vida de Cristo desde el punto de vista del apóstol Juan, dirigida al público familiar.

Esta semana el cine ofrece un abanico de emociones: desde la adrenalina de la ciencia ficción hasta los dilemas morales del drama histórico, pasando por el terror psicológico y las historias de amor y fe. Una cita ineludible para los amantes de la gran pantalla