Santa Marta ha vivido en la tarde de este domingo uno de los actos más solemnes de sus fiestas patronales en honor a Santa Marta. El pregón institucional, ofrecido por el empresario local Fernando de la Calle, ha congregado a numeroso público en los jardines de la urbanización Signo XXV, donde el pregonero ha recordado sus vivencias en las calles del municipio, al que ha visto crecer y cambiar en las últimas cuatro décadas.

En este sentido, el alcalde de la localidad, David Mingo, ha destacado de él su "compromiso, cercanía, entrega y amor incondicionall al pueblo en el que se crió". "Ha formado parte viva de nuestro municipio, emplea a unas 30 personas y ha demostrado que es posible emprender desde los valores", ha asegurado.

Por su parte, Fernando de la Calle ha repasado la historia del municipio ligada a la de su familia y a la llegada de sus abuelos a Santa Marta, ha recordado anécdotas, historias y vivencias de su infancia y juventud y ha dado voz a la lucha contra la enfermedad 'piel de mariposa', que padece el pequeño santamartino Javi Gallo y cuyo padre trabaja en la empresa del pregonero. "Ahora hay un medicamento que cura la enfermedad, pero es caro. Por eso quiero hacer un llamamiento a todas las autoridades competentes para que sean valientes y traigan pronto a España la medicina para curar a Javi", ha dicho.

Además, De la Calle ha querido homenajear a las personas que vivieron en el municipio entre los años 50 y 80 del pasado siglo porque "trabajaron durísimo para hacer de Santa Marta lo que es hoy en día".

"Mi sentimiento de apego a este pueblo es infinito", ha dicho y ha recordado a algunas de las peñas del municipio, que tiene "las mejores fiestas de la provincia".

En el acto han estado presentes los miembros de la Corporación municipal, la subdelegada del Gobierno en Salamanca, Rosa López, miembros de todos los grupos de la Diputación provincial, alcaldes y concejales de otros municipios de la provincia, así como autoridades militares. Una cita que ha estado amenizada por la música del cuarteto Ítaca y que ha concluido con un vino de honor para todos los asistentes.