La vigésima edición del Festival Internacional de las Artes de Castilla y León (FÀCYL) ha cerrado sus puertas con un balance "muy satisfactorio", en palabras de la viceconsejera de Acción Cultural, Mar Sancho, quien ha valorado especialmente el impacto artístico, social y cultural del evento, que este año ha reunido cerca de 100.000 espectadores en las calles, plazas y escenarios de Salamanca.

En este vigésimo aniversario, la Junta ha redoblado su apuesta por una cultura de vanguardia, basada en la innovación, la producción propia y la diversidad artística. El festival ha crecido en cifras y en ambición: de las 60 actividades de 2024 se ha pasado a más de 80, con 50 compañías participantes (32 nacionales y 18 internacionales), 13 estrenos y 10 producciones propias, muchas de ellas nacidas del trabajo conjunto con colectivos, artistas emergentes y compañías de la Comunidad.

Sancho subrayó que "FÀCYL se ha consolidado como un referente en el panorama cultural español", y puso en valor su capacidad para generar "producciones originales, laboratorios de ideas y experiencias culturales únicas", todo ello integrando el talento joven, la colaboración institucional y la implicación activa del tejido cultural y empresarial de Salamanca.

CIUDAD ESCENARIO

Durante cinco días, del 18 al 22 de junio, Salamanca se ha transformado en un gran escenario urbano donde la música, el teatro, la danza, el circo, las nuevas tecnologías y el arte visual han convivido en una programación heterogénea y de alto nivel. La ciudad Patrimonio de la Humanidad ha acogido actividades en una veintena de espacios escénicos, con especial protagonismo de plazas históricas como la plaza Mayor, el patio Chico o el entorno de Escuelas Mayores.

El festival comenzó el 13 de junio con un concierto extraordinario de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, dirigida por Baldur Brönnimann y con el percusionista Dominique Wleeshouwers como solista. Fue el preludio de una edición marcada por la calidad artística y el esfuerzo colaborativo entre instituciones, asociaciones, compañías y ciudadanía.

Las tecnologías aplicadas al arte han tenido un protagonismo central en esta edición. Espectáculos como 'El latido de la luz’ en la plaza Mayor, 'Mapping On' en el patio Chico, 'Pinturas Efímeras' en Escuelas Mayores o 'Piedra y Luz' en la Catedral Nueva han llenado de color y movimiento las noches salmantinas, convirtiendo la arquitectura histórica en una pantalla viva.

La música ha llegado a todos los públicos, con una programación que abarcó desde el pop alternativo de Antílopez o Itaca Band, hasta la música internacional de artistas como Tonina Saputo, Katie James o DJ Atatá. Espacios como la Casa de las Conchas acogieron sesiones de música electrónica con artistas de Brasil, Argentina o Ecuador, y escenarios como el Liceo o el Patio Chico ofrecieron conciertos íntimos y potentes a partes iguales.

TEATRO, DANZA Y CREACIONES PROPIAS

La vertiente escénica del festival ha incluido una potente presencia del teatro, la danza y el circo contemporáneo. Entre los estrenos de producción propia destacó 'La Estación', un montaje multidisciplinar en el Palacio San Boal que combinó videomapping, performance, danza y creación audiovisual, con la participación de colectivos como Imaginart, Claryartides o Victoria Pole Dance.

Otros montajes destacados han sido el teatro improvisado de Impro Impar Show, las obras 'El Percusionista' y 'El cazador de imágenes' en el Teatro Liceo, o el espectáculo inaugural aéreo 'Euforia', de la compañía Sacude, que congregó a miles de personas en la plaza Mayor.

La danza también ha brillado con propuestas como la Gala de la Escuela Profesional en el Teatro Liceo, mientras que la literatura, el cine y la divulgación científica han tenido su espacio en actividades paralelas como los Coloquios Cervantinos, la colaboración con la Escuela Internacional de Cine y TV de Cuba, las Jornadas Astro del Gran Telescopio Canarias o las múltiples exposiciones repartidas por la ciudad.

La viceconsejera Sancho quiso destacar la dirección artística de Rodrigo Tamariz, responsable por tercer año consecutivo del enfoque conceptual y visual del festival, así como la implicación del Ayuntamiento de Salamanca, instituciones locales, asociaciones culturales y la Asociación de Empresarios de Hostelería, que ha colaborado estrechamente en esta edición.

En total, FÀCYL ha contado con compañías de 14 países, entre ellos Francia, Italia, Colombia, China, Cuba, Sudáfrica, Jamaica o Ucrania, reafirmando su carácter internacional y multidisciplinar.

APUESTA DE FUGURO

La edición de 2025 no solo ha sido una celebración de dos décadas de historia, sino también una mirada al futuro. La incorporación de jóvenes talentos, la producción propia, la diversidad de lenguajes artísticos y la apuesta por la innovación han convertido a FÀCYL en una plataforma de creación, experimentación y conexión con la ciudadanía.

Consolidado como uno de los festivales culturales de referencia en España, FÀCYL mira ya hacia su próxima edición con el reto de seguir creciendo sin perder su esencia: llevar el arte a la calle, hacer partícipe al público y colocar a Salamanca en el epicentro de la cultura contemporánea.