El martes Perfumerías Avenida afronta su oportunidad de volver a estar, una vez más, entre los ocho mejores equipos del continente. Está en su mano y conseguirlo pasa por superar al Serco UNI Gyor, equipo húngaro que ocupa la última posición del grupo y que en Würzburg no se jugará nada aunque eso es algo que también le sucedía en las últimas jornadas en las que ha lanzado el aviso de que su inteción está lejos de despedirse de la Euroliga dándose un paseo. La semana pasada en su pista puso contra las cuerdas a Cukurova (71-76) y la anterior superó a Polkowice -de paso hizo un favor a Avenida-, con claridad 91-80. Perdió solo por cuatro puntos ante Praha y con una diferencia de seis en la pista de Virtus Bolonia. Marcadores que sirven como aviso de que el duelo en el pabellón salmantino no será de los de coser y cantar.

Aunque fue competitivo desde el inicio -más en su feudo-, el salto de calidad definitivo lo dio el UNI Gyor tras el fichaje de una vieja conocida en Würzburg. Una jugadora que la temporada pasada dejó huella pese a no estar toda la temporada y que, sin duda, pudo ser clave en una resolución distinta de la final de la pasada Liga porque una lesión dejó fuera a Bridget Carleton y Avenida lo notó.

El impacto de la canadiense en el juego de Gyor es incontestable. En siete jornadas es, de largo, la que más ha jugado con una media de 35,6 minutos por encuentro. Bien sabido es en Salamanca que es una jugadora qu suma en todas las facetas del juego y desde su llegada a Hungría en Euroliga su media es 18,4 puntos media (con más de un 62% de porcentaje de acierto) y 6,6 rebotes por partido además de 1,7 asistencias. 

Una amenaza exterior más que se suma a la de un equipo en el que todas tiran desde larga distancia con porcentajes elevados, que cerca del aro hace daño con su envergadura, sin duda se eleva por calidad como el último gran escollo de Avenida. Una jugadora de Euroliga que se despide este año de la competición continental en el pabellón salmantino y que habrá que intentar que no repita gestas como la que realizó hace un par de semanas en el encuentro frente a Polkowice con unas cifras al final del choque de escándalo. Carleton anotó en aquel partido 41 puntos con 11 de 15 aciertos y 8 de 10 triples, cogió seis rebotes y repartió una asistencia para una valoración final de 47.