La Feria Taurina de Salamanca ha encarado su tercera tarde con la celebración del I Certamen Internacional de Escuelas Taurinas Ciudad de Salamanca en La Glorieta. Alejandro Mora, Jesús García, Manuel Martín, Manuel Pérez y Raúl Montero salieron a hombros tras un buen encierro de López Chaves.
FICHA TÉCNICA
Más de media plaza llena, se lidiaban novillos de Santiago López Chaves.
Alejandro Mora (Salamanca) de negro y oro; dos orejas.
Raúl Montero (Salamanca) de azul y oro; dos orejas.
Manuel Martin (Salamanca) de rosa y oro; dos orejas y rabo.
Jesús García (Fundación 'El Juli') de blanco y oro; dos orejas.
Leonardo Passareira (Salamanca) de azul y oro; oreja.
Manuel Pérez (Badajoz) de celeste y oro; dos orejas.
Lluvia de orejas en la tercera cita fuera de abono de la Feria Taurina de Salamanca. Once orejas y un rabo para los seis novilleros sin caballos que lidiaron una gran novillada de la ganadería de Ignacio López Chaves que salió a hombros de La Glorieta.
El salmantino Manuel Martín fue el claro triunfador. Tuvo suerte al tocarle el mejor novillo de la tarde que aprovechó llevándolo muy largo y empapado en la muleta finalizando con bonitos remates. Destacar su toreo con la mano derecha, de rodillas y cosido a la muleta ante un animal pronto, con recorrido y humillación. El público entregado pidió dos orejas y rabo.
Manuel Martín en La Glorieta (Foto: De la Peña)
Alejandro Mora tuvo que vérselas con un frío encastado y correoso animal, que resolvió a base de técnica, entrega y esa torería que atesora. Cabe destacar el impresionante quite por chicuelinas citando en corto y con las manos muy bajas. Finalizó con un estoconazo. Dos orejas.
El ganador de la clase práctica de Salamaq 2017, Manuel Montero, volvió a demostrar en La Glorieta su oficio y saber andarle a los toros ante un oponente no muy claro. Después de parar a 'Corredor' a la verónica lo fijó en la muleta para realizarle una faena de poder, temple y ligazón. Bajonazo. Dos orejas.
Desde la Fundación de 'El Juli' llegaba Jesús García, con mucha valentía paró al cuarto de la tarde, novillo muy encastado que pedía el carné. Demostró una técnica muy depurada en una faena limpia que no llegó a calar en los tendidos. Metió la espada entera. Dos orejas.
El portugués Leonardo Passareira mostró gran variedad con el capote ante un novillo sin humillación, tardo y con poca fijeza. Siempre muy bien colocado y con bonitos remates realizó una bonita labor que emborronó con la espada. Oreja.
Cerró plaza el jovencísimo extremeño, Manuel Perera, ejecutó una labor poniendo mucha ilusión, raza y entrega que caló en los tendidos charros por su gusto a la hora de ejecutar las suertes. Larga faena con bonitos remates y acertado con la espada cortó dos orejas.
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