El largo fin de semana del 9 al 12 de octubre ha dejado un panorama desolador. En plena ola de positivos de Covid y con las cifras de la capital en niveles peligrosos, las interveciones de Policía Local y Policía Nacional dejan un panorama desolador con unas cifras que dan vergüenza ajena. Las casi 300 multas por no llevar mascarilla, las casi cien intervenciones por ruidos vinculadas a fiestas en pisos y otros sucesos como las sanciones por horarios, la detención de siete personas en una riña o la expulsión de más de un centenar de alumnos, 75 de ellos por una barra libre, son inadmisibles en estos momentos.

Desde el jueves por la noche, pistoletazo de salida a los días centrales del ocio nocturno, la Policía Local ha sumado 297 denuncias por no llevar mascarilla, los peores días el jueves y el sábado con 85 y 86, respectivamente. En ruidos, se han sumado 88 denuncias; la peor noche fue la del jueves con 45 denuncias de vecinos; el sábado hubo otras 23.

Además, el jueves se registraron dos denuncias por incumplir el horario de cierre, tras la operación conjunta en 19 locales entre Policía Local y Policía Nacional, y el sábado hubo otras dos. El sábado por la noche hubo cinco detenidos en una riña familiar, y  un total de siete en esa noche. Además, ha habido sanciones por otros motivos: decomiso de 20 botes de spray a tres jóvenes, dos peleas en vía pública, además de sanciones por otros motivos (orinar en vía pública, faltas de respeto, posesión de sustancias...). Además, se lleva a cabo operativo para disolver aglomeraciones al cierre de bares también con CNP  en diversas zonas. 

Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado han presentado un total de 332 denuncias en la Comunidad por mal uso de la mascarilla en la última semana, entre el 5 y el 11 de octubre, según los datos facilitados por la Delegación del Gobierno. Salamanca se encuentra a la cabeza con 106 infracciones.