La semana ha empezado con nuevos y preocupantes datos de la pandemia en Salamanca, que no termina de remitir en lo que parece una séptima ola, más leve en todos los sentidos que las conocidas hasta ahora y mucho menos letal, pero presente todavía. Es el resultado de una nueva oleada de contagios registrados en las últimas semanas y que han vuelto a elevar el impacto hospitalario de los casos de coronavirus, aunque parece que la incidencia baja y apunta al final del episodio.

Según los datos de Sacyl, este martes el número de ingresados ha llegado a los 70 en el Hospital de Salamanca entre 67 en planta y tres en UCI que hay. La cifra está muy lejos de los peores momentos de la pandemia, pero es que ahora mismo estamos sin prácticamente medidas de contención. Esos 70 enfermos con Covid ingresados, por esta u otras patologías, son el nivel más alto desde finales de febrero y está un 30% por debajo de la cima de la sexta ola, cuando se superó el centenar de ingresados entre planta y UCI.

Como ha asegurado Sanidad, la gran mayoría están ingresados por otras patologías, pero acaban dando positivo en Covid, lo que complica su pronóstico. En los últimos cuatro días han fallecido 4 personas en el Hospital con coronavirus y se han notificado 556 positivos.

Las hospitalizaciones son el resultado de este aumento de positivos. Desde mediados de abril el número de casos activos en Salamanca ha pasado de poco más de 7.700 a más de 10.000 que se contabilizan ahora y el número de casos registados de menos de 100.000 a más de 103.000 en total en toda la pandemia. Y eso se nota también en la incidencia. El único dato disponible ahora es el de la incidencia de mayores de 65 años y esta ha escalado hasta los 1.357, ligeramente por debajo de su pico de casi 1.500 del último día de abril, un descenso que puede indicar que el episodio ha terminado, aunque por experiencia el Hospital tardará en vaciarse.