Sergio Ramos puso fin este lunes a un calvario que ha durado siete meses y diez días. El jugador, que el pasado 15 de abril se fracturó el ligamento cruzado anterior de su rodilla, mostró su satisfacción en sala de prensa: “Después de tanto tiempo, me han dicho hoy que me han dado el alta y estoy muy contento”, subrayó.

El canterano explicó que los meses más duros fueron los posteriores a su lesión: “Mi recuperación ha sido muy larga. Los primeros meses son los más complicados porque estas prácticamente parado. Luego, cuando ya empiezas a trabajar en el gimnasio y a correr, lo ves todo un poco más cerca”, añadió.

Aunque entiende que es pronto para recuperar su mejor estado de forma, el jugador salmantino indicó que luchará por conseguir una ficha del primer equipo: “Es complicado, el equipo está compitiendo muy bien. Vengo a trabajar, a darlo todo y, por qué no, a ganarme el dorsal y el puesto”, concluyó.

El club aún no sabe si el jugador será cedido o terminará en el Salmantino.