El Club Deportivo Guijuelo firmó uno de esos triunfos que marcan temporadas al imponerse a domicilio a un rival directo como el Palencia Cristo, en un encuentro cargado de tensión, oficio y emoción hasta el final. El partido se puso pronto de cara para los chacineros, que aprovecharon un saque de esquina en los primeros compases. Apenas superados los cinco minutos, el balón quedó suelto en el área tras el centro y Kike Martín, más rápido y listo que nadie, encontró el hueco para ejecutar y adelantar a los de Romo.
A partir de ahí, el Guijuelo supo manejar el partido con madurez. En la primera mitad se defendió con orden, sostuvo la ventaja gracias a las intervenciones de su guardameta y no renunció a buscar el segundo. Ese premio llegó tras el descanso, en el minuto 50, cuando Álex culminó con acierto un centro medido de Víctor Segura, poniendo tierra de por medio y dando la sensación de partido encarrilado.
Sin embargo, el fútbol volvió a demostrar que nada se decide hasta el pitido final. A siete minutos del final el Palencia recortó distancias y, apenas cuatro después, un penalti en contra estuvo a punto de cambiarlo todo. Pero la fortuna también juega y los locales erraron la pena máxima. En el tiempo añadido, el Guijuelo supo controlar los nervios para cerrar una victoria de enorme valor que, a falta de que se complete la jornada, le permite dormir como líder y cerrar el año en una posición inmejorable.
También fue muy positivo el cierre de año para la UD Santa Marta, que se despidió de su afición con una contundente goleada ante el Becerril, penúltimo clasificado. El triunfo mantiene a los tormesinos plenamente metidos en la pelea por el play off y refuerza la confianza del grupo. El partido comenzó a encarrilarse pronto con el tanto de Villardón, que no perdonó desde la frontal del área pequeña tras un saque de esquina.
Con el 1-0 se llegó al descanso, pero tras la reanudación el Santa Marta desató todo su potencial ofensivo. Martín Galván sacó magia de la chistera para hacer el segundo desde la frontal, y poco después, nada más saltar al césped, David Martín firmó el 3-0. El festival continuó con el cuarto tanto, obra de Coque tras un rechace apenas tres minutos más tarde. Con el partido totalmente controlado y veinte minutos por delante, aún hubo tiempo para el quinto, que llegó en el 84 por medio de Richardson, cerrando una tarde redonda.
Por su parte, Unionistas B sumó un punto en una salida complicada ante el Villaralbo, un rival que, pese a su delicada situación clasificatoria, siempre se hace fuerte en casa. El filial blanquinegro tuvo opciones de llevarse los tres puntos, especialmente en la primera mitad, cuando Josito estrelló un balón en el palo. El partido se complicó en la recta final, ya que durante casi media hora los salmantinos jugaron con uno menos por la expulsión por doble amarilla de José Manuel. Aun así, el equipo supo resistir y cerrar el año puntuando. Aunque no logra salir de la zona baja, el empate permite despedir el año sumando y con la sensación de competir en escenarios difíciles.
En definitiva, balance positivo para los tres equipos salmantinos, que cierran el año cumpliendo objetivos: un Guijuelo en lo alto, un Santa Marta sólido y con aspiraciones claras de play off y un Unionistas B que, pese a las dificultades, sigue intentando agarrarse a la categoría.
