Feliz 2026 desde Salamanca. Miles de jóvenes llegados desde los cuatro puntos cardinales del país han adelantado la nochevieja y han convertido la Plaza Mayor, un año más, en la mayor fiesta al aire libre de España. León, Burgos, Valencia, Cáceres, Málaga, Cantabria, Almería o incluso Melilla han estado 'representadas' esta noche en Salamanca, según han anunciado los presentadores del acto.

El Fin de Año Universitario sigue quemando ediciones y atrayendo a jóvenes como si fuera la primera vez. Da igual el frío -algunos han acabado con el gorro de Papá Noel calado hasta las cejas-, el desplazamiento hasta Salamanca o si los artistas gustan más o menos, porque la única excusa para dejarse caer por la ciudad es ser honesto con uno mismo y tener ganas de salir de fiesta.

El ritmo lo pusieron Mafalda, Chema Rivas ('Mil tequilas), Alex Diez y Dani Serra. Sonidos para todos los gustos y animación camino de las doce de la noche, con un emotivo recuerdo a Robe Iniesta y canciones de Extremoduro cantadas a capella por todo el público.

La Plaza Mayor cogía color y ganaba intensidad y empuje conforme se acercaban las campanadas. Hasta esa hora bruja de la medianoche, grupos de gente cenando en los bares y haciéndose fotos de delante del árbol. Y por supuesto, chavales saltando en el centro de la Plaza, policías patrullando y efectivos sanitarios cruzando los dedos para no tener demasiado trabajo. 

Ellos son la parte más visible del fin de año universitario, aunque las raíces de la organización se extienden por toda Salamanca, encarnadas en los vigilantes en cada rincón, los controles de aforo, las ambulancias y coches de bomberos a tiro de piedra de la Plaza -algunos efectivos se pasearon por el ágora examinando todo con ojo experto- y el personal de limpieza esperando a que sonasen las campanadas y la gente se marchaee a los bares. Los kilos de basuras recogidos (4.150 kilos en 2024, porque no hay año que no queden vasos y papeles por el suelo) no se conocerán hasta este viernes.

Respecto a la asistencia, quien quisiera pasear por la parte trasera del ágora podía caminar como un día cualquiera, porque muchos optaron por quedarse en las terrazas vecinas (la plaza de San Julián estaba a rebosar) o pasar directamente a la fase de los bares. Las cifras de asistencia llegarán a lo largo de hoy, día de regreso a casa para todos los que viven fuera de Salamanca que, a estas horas, aún estarán tomando algo.